La vibra contenida en estas letras iniciales es de ansiedad. Ansiedad generada debido a que cierta señorita que hoy cumple años se le ocurrió pedir de regalo eso, unas letras; lo cual posiciona al que escribe como alguien a quien la señorita cumpleañera gusta de leer y eso nos obliga a nosotras las letras a hacer las mejores combinaciones posibles y dar un buen regalo de cumpleaños, porque es bien sabido, y repetido, por todos qué un regalo de cumpleaños debe de tratar de ser siempre el mejor.
Otra hubiera sido la vibra contenida en estas letras iniciales si la señorita no hubiese externado su deseo, pero qué se le va a hacer, así es ella. Directa, decidida, sincera, y demás atributos que Ella y todos los demás percibimos, pero no ahondaremos en ellos porque podría prestarse a interpretaciones erróneas respecto del objetivo de estas letras, y el chisme no es algo que a Ella le guste. Aunque ya pensándolo dos veces sí lo es, sino no sería psicóloga en formación, muy buena por cierto.
Pero dejemos la “lameboteria” (del verbo Lame-botas) para otro momento porque esto no se trata de eso, se trata de un cumpleaños. Un cumpleaños que aparece precisamente una vez al año, lo cual nos conecta directamente con el planeta Tierra el cual tarda trescientos sesenta y cinco días aproximadamente en dar una vuelta al Sol. El sol a su vez forma parte de otro sistema de estrellas llamado las Pleyades que son siete en total y que giran alrededor de otra estrella más grande llamada Alción. Dicen los chismosos de los Griegos que eran siete hermanas que estaban siendo acosadas por Orión y las tuvieron que esconder en la constelación de Tauro. Orión por su parte es fácil de ubicar en el cielo, lo conocemos desde siempre por su famoso cinturón confundido en muchas ocasiones con los Tres Reyes Magos. La constelación de Orión es visible solamente en Verano. Verano es una estación que inicia a finales de Junio aproximadamente. Junio es el mes del cumpleaños de la que reciba este regalo, no a finales sino a principios.
De hecho es el seis. El seis de Junio, el seis del sexto mes ¿de que año? No estamos autorizados para decirlo, eso es algo que le corresponde al cumpleañero. Lo sabemos porque desde chicos nos entrenan para decirlo, y si no solo es cuestión de pasar algunas horas con algún cumpleañero o revisar su facebook y encontraremos las clásicas frases: “¿ya cuantos cumples? …ya estás viej@, que cumplas muchos más, que te la pases genial, a ver cuando salen las chelas, queremos pastel, felicidades, feliz cumpleaños, sabes que te deseo lo mejor, y así y así”
Podemos, como buenos psicológos chismosos, adentrarnos psicoanalíticamente en los comentarios y llegar a una conclusión acerca de la sinceridad que en ellos existan pero no lo haremos. Lo que si haremos es mencionar que aquello son solo felicitaciones, y que por eso no importa si son sinceras o no, lo importante es saber que alguien sabe que hoy, hace equis años, el Universo conspiró para que vinieras a esta Galaxia, a este Planeta, a esa familia, a esta escuela, en esta ciudad, en esta forma humana la cual por cierto, te sienta bien.
Ojalá todos recibiéramos tantos regalos como felicitaciones pero no se puede porque un regalo lleva una carga mayor, un regalo lleva una serie de códigos no dichos que van más allá de las palabras y los mejores deseos porque es una manera de decirle al festejado lo que realmente sentimos por él/Ella sinceramente. Es la manera de hacernos presentes en el cumpleañero en su día especial, por ello el regalo tendrá un valor diferente para el que lo recibe que para el que lo da.
Y es que se podría pensar que el regalo lo disfrutará única y exclusivamente el que lo recibe ya que será éste el verdadero dueño pero no, el que regala también recibe su dosis cuando ve la expresión del cumpleañero cuando reciba su regalo; y de hecho cuando el regalo es físico, es decir, cuando es algo que se pueda palpar con los cinco sentidos puede ser disfrutable para más personas, podemos poner como ejemplo los juguetes que reciben los niños en el cual el festejado y sus amigos disfrutarán mientras inventan sus propios juegos.
Pero no siempre seremos niños asi que cuando crezcamos recibiremos felicitaciones y regalos de diferentes maneras, habrá quien felicite simplemente en facebook, habrá quien felicite en persona, habrá quien felicite por teléfono, habrá quien lo haga en mensaje, habrá quien lo haga a las cero horas del día del cumpleaños, habrá quien lo haga al otro día, habrá quien lo haga varios días después, habrá quien festeje sin el festejado. Sea como sea todos coincidirán en las ganas de abrazar a la cumpleañera, y no solamente por sabrosearla, sino porque de esa manera es más fácil transmitir aquello que se siente que con las palabras.
Algunos acudirán a las papelerías y comprarán alguna tarjetita que les ahorrará el hecho de desear un feliz cumpleaños con palabras propias, algunos irán a tiendas de ropa y buscarán alguna prenda que le vaya bien al festejado, otros tantos irán a la tienda por un pastelito bimbo, wonder, marinela, entre otros. Algunos más preferirán comprarán un pastel completo el cual se disfrutará entre el festejado y los demás. Encontraremos también a los que buscan llenar de detalles al cumpleañero, pondremos como ejemplo los carros que suelen amanecer llenos de papeles con dedicatorias para el que cumple años. Los más romanticos llevarán serenata, los más olvidadizos pedirán perdón por haberlo olvidado, los más improvisados comprarán algo en el camino, los más alcoholicos regalaran botellas o dispararán las chelas, los más ricos regalarán viajes o carros, los más pobres regalarán los mejores deseos.
Uno que otro se atreverá a regalar un detalle diario sin temor a que se le acaben las ideas porque lo realmente valioso, como ya hemos visto, no es el regalo en sí sino el detalle. De manera que no importa si aquella persona millonaria regaló un coche, importa el hecho de que haya ido a comprarlo, escoger el color, el modelo, y todas las cosas que van más allá de cuatro llantas y un volante. Así que tampoco importa si se regala un paisaje lunar, o unas letras improvisadas en alguna clase, o un boleto del metro, o un café, o unos tacos, o un sushi. Habrá también quien regale su presencia, el cual por cierto se posiciona como uno de los regalos más valiosos ya que la presencia no tiene un valor cuantitativo sino cualitativo.
Si bien estas letras ya no fueron sorpresa por el hecho de que usted, señorita Paulina, haya externado su deseo queremos informarle que estamos muy deseosos de ver sus ojos y su sonrisa cuando escuche estas palabras porque ha de mencionarse que aparte de ser usted alguien que irradia la pura buenavibra desde su interior tiene usted, en su exterior, una mirada que mata, unos ojos que hipnotizan, unos labios que se antojan, una sonrisa que funciona como una ventana para demostrarnos los grados de sinceridad a los que usted llega. Asi que nosotras las letras nos despedimos por el momento agradeciéndole a sus odios y a sus ojos el tiempo que se tomó en prestarnos atención pero sobre todo deseándole que hoy, en su cumpleaños, reciba usted los regalos más sinceros y sepa que siempre hay alguien pensando en usted y deseándole lo mejor, sea su cumpleaños o no. Y ya por último es difícil no caer en los estereotipos, pero qué se le va a hacer si asi es uno, por lo tanto FELIZ CUMPLEAÑOS PAULINA
